Mientras en las gradas se escuchaban porras y gritos entusiastas en apoyo a los "verdes", en la cancha, el equipo contrario (rojos) pedía que se parara la masacre. Pues bastaron dos tiempos de 30 minutos para que el marcador finalizara con un 12 - 1.
Y no, ningún equipo resultó más ganador y beneficiado como las decenas de niñas y jovencitas del Internado Guadalupano Calacoaya A.C. que además de recibir donaciones en especie, disfrutaron un partido de fútbol entre rockeros y medios, acompañadas de música en vivo y una breve pero emotiva convivencia con aquellos pamboleros que dejaron a un lado instrumentos y cámaras para convertirse por unos instantes, en los ídolos de las internas.
Muchas manos y corazones nobles trabajaron con gran esfuerzo para lograr dicha meta: dar mucho sin esperar algo a cambio.
Una vez más, Chava Rock y sus secuaces hicieron de las suyas, y amenazan con llegar a más canchas, deportivos e instituciones; y dejar un granito de arena que sin duda, estará marcando una gran diferencia.
Para Ciudad Radio: La Borbo
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